Alcoy no ha podido librarse de la ola de escándalos que ha afectado a las cabalgatas de reyes de toda España. Tras descubrirse que los tres camellos que transportaban a los magos de oriente eran en realidad camellas se ha desatado un fuerte movimiento de indignación y de rechazo, encabezado por la conocida pija autóctona Cayetana Alvarez de Sanchordi, actual presidenta del Club de Bayoses la Granja Cecilia y directiva de la Real Maestranza del Puntet, que ha afirmado que “no te lo perdonaré jamás, Toni Francés. Jamás”.
Esta dama de alta alcurnia ha denunciado que sus dos hijos –Mari Lirios y Mauro Jorge- han quedado traumatizados ante la visión de tres camellos hembras. Cayetana considera que esta suplantación supone un duro golpe a la centenaria tradición epifánica alcoyana y que acarrea graves consecuencias para los niños. En declaraciones a “Más falso que un Judas” ha afirmado que “esta actuación irresponsable amenaza con convertir nuestra Cabalgata de un carnaval. Hoy se cambian los camellos por camellas y cualquier día nos encontraremos con una mujer leyendo el Bando”. La líder del pijerío alcoyano responsabiliza directamente al alcalde de esta situación y asegura que “la aparición de las camellas es una señal evidente de que la izquierda radical sólo busca acabar con los valores tradicionales de la familia”.
Cruzada contra las pajes pechugonas
Cayetana Alvarez de Sanchordi, marquesa consorte de Sotarroni y Serelles, saltó a la fama hace dos años, cuando encabezó una cruzada contra la participación de chicas como pajes negros en la Cabalgata de Reyes. En aquella ocasión denunció que sus hijos también quedaron traumatizados al recibir los regalos de manos de un grupo de pajes pechugonas con larga melena rubia. Afirmó entonces que esta equívoca imagen de los servidores de los magos podía contribuir a generar irreparables confusiones sexuales entre los más pequeños y abogó por la prohibición radical de la participación de mujeres en los actos epifánicos, limitándola a las Pastoretes “porque sería indignante sacar a un grupo de hombres vestidos de pastora o de vieja del Tirisiti”