El resultado del último festival de Eurovisión, con la victoria de la cantante barbuda Conchita Wurst, ha tenido inesperadas consecuencias en Alcoy. La insólita estética de la diva austriaca permitirá resolver la grave polémica en torno a la posibilidad de que las mujeres puedan ejercer cargos festeros. Según ha podido averiguar “Más falso que un Judas”, Conchita hará de capitán y de favorita a la vez en la Entrada de Moros del año próximo.
La decisión ha sido aprobada en la última asamblea de la filà Califes del Ensanche, que el año próximo ostentará la capitanía mora y que ha cursado inmediatamente la invitación a Austria. La ganadora de Eurovisión ha aceptado la propuesta, anunciando que estará en Alcoy durante la próxima Trilogía, señalando que para el traje está pensando en un diseño de John Galliano. Respecto a la música, fuentes de la filà han señalado que se está trabajando en una adaptación a marcha mora de la conocida canción de Abba “Dancing queen”.
La noticia ha sido acogida con gran satisfacción en todo el panorama festero. El primer tró de la filà Califes ha declarado que “la unificación de los cargos de capitán y de favorita nos permitirá un considerable ahorro económico, que podremos invertir en marisco para la comida del día de San Jorge, ya que llevábamos tres años a dieta de ganchitos de queso y de papas Lolita”. La euforia ha sido especialmente notable en el Casal de San Jordi. Fuentes de este organismo señalaron que “el caso de Conchita Wurst abre el paso a la posibilidad de formar escuadras mixtas; basta con que las festeras se dejen barba y con que no sean muy pechugonas”.