Cuatro días después de la marcha de Fabra, sigue la polémica en torno al puente entre el Viaducto y la Zona Norte. En un comunicado, emitido en el día de ayer, la Generalitat ha admitido la existencia de pequeños fallos en el diseño de la pasarela. No obstante, el gobierno autonómico ha querido subrayar que “el nuevo puente no presenta grandes problemas de seguridad para los coches, siempre que se circule por él a menos de veinte kilómetros por hora y que no llueve o nieve”.

Desde la Conselleria de Infraestructuras se ha negado que la pendiente y las curvas de este vial sean excesivas, señalándose que “hay que tener en cuenta que el puente está en Alcoy y que los alcoyanos están acostumbrados desde siempre a las cuestas. Una gente que es capaz de aparcar en el Gurugú es capaz de cualquier cosa”.

Por su parte, el Ayuntamiento ha hecho una valoración muy crítica del puente y se plantea la posibilidad de cerrarlo a tráfico rodado y convertirlo en una pista permanente de sakateboard. La concejala de Turismo ha afirmado que “no hay mal que por bien no venga, seguiremos utilizando el puente de la Petxina para circular, pero Alcoy será la capital mundial del skateboard”. Los responsables municipales preparan la participación en próximas ferias turísticas bajo el lema de “Ven a Alcoy y échalo todo a rodar”.