En declaraciones a Radio Alcoy, el ex alcalde Jorge Sedano ha defendido la actuación de su gobierno en el proceso de ampliación del Teatro Calderón y ha afirmado que “cuando entramos a gobernar, Alcoy no tenía prácticamente infraestructuras tipo teatro”, recordando que los dos recintos titularidad pública de la ciudad (el Calderón y el Principal) estaban en muy malas condiciones.

Aunque la declaración del ex primer edil se ajusta estrictamente a la realidad de la época, Sedano se olvida de un detalle importante: Alcoy carecía de infraestructuras escénicas, por que su partido se encargó de boicotear desde la oposición el ambicioso e ilusionante proyecto del auditorio de Santa Rosa. Los políticos tienen la memoria muy selectiva y el ex alcalde parece no recordar aquella bochornosa carta en la que Miguel Peralta, en funciones de jefe de la oposición municipal, le pedía al presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, el bloqueo de las aportaciones del Consell para reformar la manzana de Rodes y convertirla en un centro dedicado a la música, el teatro y los conciertos.

Catorce años después de aquella tristísima jugada política, Sedano intenta reescribir la historia de esta ciudad. Hay que recordar que Peralta consiguió su objetivo: el proyecto de auditorio perdió los apoyos del gobierno autonómico, quedó archivado en el cajón del olvido y la manzana de Rodes inició su camino hacia la ruina total.