Licenciado en Derecho por la Universidad de Madrid y llamado por su vocación al sacerdocio, en pocos años fue ordenado de presbítero, tomando posesión de una capellanía fundada por su madre, doña Josefa Gisbert, en la Real Parroquia de San Mauro y San Francisco, siendo nombrado cura párroco de la misma en los años que precedieron a la Guerra Civil. Durante la República obtuvo en Alicante el título de Maestro de Primera Enseñanza y al terminar la contienda sería designado arcipreste del distrito y cura párroco de la Parroquia de Santa María. En la nueva distribución parroquial de 1954, por la que se fundaban en nuestra ciudad nuevas parroquias, quedaría designado cura párroco de la del Sagrado Corazón, en cuya barriada había él fundado un Patronato.
Gracias a José Arnauda llegó a Alcoy la Institución Teresiana, iniciándose la construcción del nuevo templo Parroquial de Caramanchel. Llevó a cabo también iniciativas similares en las barriadas de Algezares y del Tosal, en las cuales construyó escuelas y una ermita.
Fue consiliario de la Organización Nacional de Ciegos. Fueron objeto de su labor apostólica, los pobres y necesitados, siendo muy conocido y querido en las barriadas humildes. Sacerdote ejemplar, sencillo, humilde, laborioso y activo, pese a estar enfermo desde muy joven y pertenecer a una de las familias más acreditadas de Alcoy. Editó varios libros en Alcoy entre ellos «Meditaclones sobre la vida y muerte de nuestro Señor Jesucristo». Se cuenta que, en ocasiones, dormía en el suelo por hacer donación de su propia cama a desvalidos sin hogar..
Su entierro constituyó una gran manifestación de duelo, al que se sumó toda la feligresía entera y numerosas personas de todas las clases sociales de la población. Don José Arnauda era muy querido y respetado por todos, incluso los no católicos.
EL BARRIO DE CARAMANCHEL
El barrio de Caramanchel estuvo discriminado durante mucho tiempo por su lejanía del centro urbano. Carecía de todo: iglesia, escuelas, estamentos sociales, y no sólo se trataba de las veinticuatro casas de barrio sino también de la cantidad de casas de campo que llenaban toda la huerta de Cotes Baixes. Al construir el ferrocarril Alcoy-Gandía, inaugurado oficialmente el 25 de enero de 1893, que tanto costó hacer y tan poco suprimir, así como al construir el Matadero Municipal en 1911, el barrio se animó un tanto. Lo que hoy es la barriada, se debe en gran parte al esfuerzo infatigable del sacerdote D. José Arnauda Gisbert, que dedicó gran parte de su vida íntegramente al barrio de Caramanchel. Con su principal colaborador, el arquitecto D. José Cortés Miralles y con la ayuda de D. Ricardo Miralles, Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, y Director del Ferrocarril Alcoy-Gandía, que facilitó la adquisición de pequeñas parcelas según las posibilidades de D. José Arnauda, se fue construyendo según las necesidades y posibilidades del momento. Se empezó por construir una Escuela-Ermita, un colegio de niñas, luego uno de niños; un salón de reunión como salón de actos, una cantina escolar, y otras cosas más. En 1945 estas escuelas serían elevadas a Escuelas Graduadas. Ante la dificultad de encontrar maestras tituladas para regentar estas escuelas, D. José Arnauda propuso a la Institución Teresiana fundada por Pedro Poveda en 1911, su instalación en el barrio. Se construiría una sencilla residencia para que se hospedaran las primeras teresianas las cuales en el año 1947 se harían cargo de la enseñanza. En 1950 se Fundó El Patronato Diocesano, al que se vinculó El Patronato Parroquial Escuela del Sagrado Corazón. Después de 70 años, en 2018, la Institución Teresiana dejó de realizar su labor en la dirección pedagógica del centro, quedando un recuerdo imborrable, no solo en el centro, sino en toda la ciudad, dada su ingente labor de siete décadas.
Fuentes: Diario Ciudad de Alcoy y Colegio José Arnauda.
Fotografías: Fototeca Ayuntamiento de Alcoy.
Link página Personalidades Notables de la Historia de Alcoy:
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Mi familia ha estado muy vinculada a D.José Arnauda,ayudándole en la creación de la parroquia y la escuela,como muchas familias más.Todas eran muy humildes pero le apoyaron porque era muy buena persona con fines solidarios a los que menos tenían.Yo he crecido y me he educado en el colegio que lleva su nombre y me emociona que se recuerde y valore su obra.