Amanecimos el lunes con una noticia que nos dejó a todos patidifusos: se había detenido a una célula yihadista compuesta por siete integrantes en nuestra terreta. Hubieron detenidos en Muro, Alcoi, Crevillent, L´Alqueria y Alicante.
Parece ser que simulaban ser una ONG, y desde este camuflaje enviaban armas, equipamiento tecnológico o dinero en contenedores cerrados a las zonas de conflicto. Además obtenían dinero también de estafas informáticas, y como es moda en los políticos (y ahora también entre los terroristas) se dedicaban al blanqueo de capitales
Aunque las ideas de estos yihadistas son bastante retrógradas, no evitan el uso de los medios más avanzados. Por ejemplo utilizaban las redes sociales para captar nuevos adeptos para convertirlos en futuros muyahidines que luego serían enviados a Siria, también para estafas informáticas o usaban diferentes perfiles para la difusión de su ideario.
Además y por último, que me ha preocupado bastante y que viene reflejado en diferentes titulares, esta célula terrorista árabe estaba encargada de captar mujeres para enviarlas a la zona de conflicto para emparejarlas/casarlas con yihadistas. Ya que el líder de este grupo tenía estrechas relaciones con el Daesh y parece ser que las españolas son bastante apreciadas como esposas/esclavas sexuales en esa tierra.
Leo en un titular de un periódico que buscaban esposas para el Califato….
Leo en otro periódico que lo que buscaban eran esclavas sexuales para los muyahidines….
Esto de las esposas ha inquietado a nuestra sociedad. Quiero decir, que lo del rapto de féminas y traslado a otra ciudad para ejercer de conejillas repobladoras es un hábito ancestral que apenas ha cambiado en siglos. Pero señores, no se preocupen, que el hábito no ha cambiado, pero sí las mujeres. Les ejemplifico la situación y de paso desmontamos una situación de alarma.
Voy a contarles una historia que pasó el sábado por la noche, carnavales en algunos pueblos de la contorná. A las cinco de la mañana Marieta volvía a casa. Marieta, que en honor a la canción era bella y traidora, llevaba un precioso y minúsculo disfraz de gatita sexi. Cierto es que a esa hora, era una gatita un poco depravada, ya que tenía el rímel un poco corrido, los bigotes a la virulé y un rabo convertido en bufanda debido al frio que hacía.
Marieta llegó a la puerta de su casa con los botines de cuero y tacón afilado en la mano y se encontró con tantas luces intermitentes, que parecía que le habían abierto un after al lado de la tienda de verduras del paquistaní. Pero no era una rave, era una redada para capturar a un integrante de una célula terrorista yihadista.
Sinceramente, Marieta estaba contenta, muy contenta, demasiado contenta debido a la cantidad de chupitos que había ingerido y sólo atinó a pensar que los disfraces estaban muy bien conseguidos y que los polis estaban muy buenos. «Dónde se ponga un hombre con uniforme, que se quiten los demás» pensó apreciando el material en formación de ataque. Cuando sacaron al barbudo vecino suyo, el mismo que cada vez que pasaba le echaba miradas libidinosas, Marieta no pudo evitarlo.
Al fin y al cabo eran carnavales, y ante la mirada horrorizada del líder yihadista se dio la vuelta, ofreció su culo en pompa embutido en un body gatita muy sexy y con la música de las sirenas le ofreció una demostración de twerking (baile que consiste en mover el trasero rápidamente al ritmo de la música) acompañada del sonido mudo de risas que atravesaban los cascos.
Y ahora es cuando viene mi reflexión: ¿porqué no dejamos que se vayan dos o trescientas Marietas a Siria o a dónde sea?
Tal vez a la sociedad de Siria o Irak lo único que les hace falta para evolucionar es que las Madres de Mártires sean fans de MYHYV y bailen al son del reguetón. Como cuando nos enviaron las Suecas Libertadoras a la España franquista y recatada. Vamos, es una idea…
¡Disfruten del carnaval!