Como se ha dicho reiteradamente, el uso de la vocal ‘a’ a comienzo de palabra es algo que a la lengua alcoyana, se la trae al pairo o, dicho en lenguaje poético, completamente floja. A esta regla gramatical los alcoyanos le dan la misma importancia que a una larga explicación de María Dolores Cospedal. Puesto que opinan que la omisión añade singularidad al idioma y, en la mayoría de ocasiones, resulta totalmente inofensiva (la omisión de la ‘a’, no Cospedal)
En la mayoría de ocasiones aunque no siempre. Porque existen palabras en determinadas épocas del año, como el momento actual cuando acecha el calor y se incrementan las visitas a playas, piscinas y baños públicos, en que la ya comentada omisión puede dar lugar a embarazosos malentendidos cuando no a denuncias por acoso verbal.
Este es el caso de la palabra hamaca, pronunciada en el ámbito local como ‘maca’ tras la eliminación no sólo de la ‘a’ sino también de la ‘h’ que le acompaña. Palabra que no debería confundir-se con el adjetivo catalán ‘maca’ (bella, hermosa) pero que se confunde.
Porque ¿de qué hablamos cuando hablamos de tirarnos sobre una maca? ¿Qué quiere decir un señor alcoyano que veranea en Piles, o Bellreguard, cuando dice: ‘vaig a tirar-me a la maca i pasar-me damunt d’ella tot el matí? ¿Se está refiriendo al asiento consistente en una armadura graduable de tijera, en la que se sujeta una tela que forma asiento y respaldo? O ¿a una persona de sexo femenino que por sus cualidades físicas o por su carácter resulta agradable y simpática? En este caso, particular, la concreción temporal aclara el significado ya que para un señor alcoyano que veranea en Piles pasarse la mañana sobre algo que no sea una tumbona no sólo es una entelequia sino un buen argumento de ciencia-ficción.
Pero si en singular la cosa tiene peligro en plural se multiplica. Imagine por un momento a ese mismo señor acompañado de unos amigos diciéndole a un camarero: Escolta xicon porta’ns unes maques i uns cubates que anem a passar-nos el matí dale que te pego. ¿Es descabellado pensar que el camarero infiera que se está preparando una orgia, una muntonà en la lengua autóctona, delante de sus propias narices sin que nadie le haya invitado a participar?
Por no hablar del monumental follón desde el punto de vista de la comprensión que puede organizarse en el caso de que los dos significantes confluyan en un mismo punto. Ejemplo: Qué maca la de la maca. Hi ha una maca a la maca. Com es diu la maca de la maca? Por todo ello si usted tiene la costumbre de utilizar la palabra maca, le recomendamos que en lugares públicos de baño la sustituya por tumbona.