cuando la novia salió de la iglesia cegada por tanta felicidad, no acertó a esquivar el puñado de arroz que se le incrustó entre el rimmel -antilágrimas- y la lentilla blanco sucio -a juego con el vestido – vaciándole el ojo.
fue el día más feliz de su vida.
durante años, tuerta y todo, disfrutó de un amor sin fronteras, famosa ong patrocinada por el opus dei. nunca le dejaron asomar su roja nariz por el elitista club masculino, a cambio obtuvo trabajar veinticuatro horas de veinticuatro: doce profesional, doce como aficionada en el hogar. y como no la dejaba dormir, no soñaba. así que olvidó vivir y ser, y se conformó con estar. mientras, cuidaba con esmero que su parche conjuntara con cortinas, cojines y humor marital, para no pensar.
no era una novia perfecta, nunca lo fue, y a veces, se despistaba e intentaba creer que podía ver con los dos ojos, y al saltar tropezaba con la correa de cuero, que no veía por su ángulo ciego.
por su vida tuerta.
insistente, se levantaba, y mirando por el derecho, olvidaba la oscuridad de su lado izquierdo, la inutilidad de lo siniestro que la acompañaba como sombra: si hay sombra, hay luz. toma sabiduría y del frasco carrasco, tanto tomó que apuró el trago y le supo amargo.
andando despacio y a tientas, palpando verdades, un día se atrevió a decirlas en voz alta. y lo que creía que era amor se le murió entre las manos, en la derecha sostuvo lágrimas del ojo sano y en la izquierda los parches picardías. con las manos húmedas y el corazón insultado, y aprovechando la orejera, tiró con tanta fuerza que se le hinchó una vena en la frente, reventando el parche, enseñando el cráter cómo polifemo lunero mojado por el relente.
y vió lo que había perdido, lo que jamás había tenido, y es que el amor no es ciego, pero a veces te deja tuerto, o manco o al año cojeas. o eso pensó.
nunca imaginó, cuando él se llevó el televisor y su autoestima, que no le devolvería su escurrido globo ocular.
para que veas
con el único ojo sano miró y lo vio todo turbio, esta vez el rimmel no era antilágrimas. ¿qué hace una novia tuerta con lágrimas negras?.
empeñar el ojo bueno.
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