-Me lo han dicho! Paquito Poques Tornes se ha dejado un morrión que para qué… Traducció: (M’ho han dit! Paquito Poques Tornes s’ha deixat un morrió dels collons (traducció un poc lliure)…) I així ho conta la xerraire (li xerra cul i tot) de Carmencín Socarrades i Trencacolls a les seues amigues del berenar de la vesprada: «os lo aseguro, me lo han dicho de muy buena tinta, Manolo, el que hizo l’alferis l’año pasado, no ha pagado a casi nadie. Lo debe casi todo y l’ampastrada ha sido de no te menees. L’anserrallada ha sido minsa, y en la filà estan que bosan del. Mi marido…, ay!
No digáis nada que si se nentera que os lo cuento me pica para haser amburguesas, dise que en la filà están que rechinflan del y que a lo mejor lo aspulsan del montepío, por miedo a que se lo gaste del tirón pa pagar el morrión tan grande que tiene. La mujer de Manolo va por la calle toda astirada, como si la cosa no fuera con della. Tiene una carota….Mi suegra dise que: eixa ha eixit tota clavà son pare, que li agradava molt bufar en caldo gelat, i es menjava els mocs a cabassos… Tu verás si será la tía descarada. Yo no sé cómo se puede ser asin, no?
I continua la seua exposició, sense deixar de brollar alegre i cavallera, la bona de Carmencín, amb la complicitat silent de les seues amigues que, de tan atentes com estan, i amb els ulls ben esbatanats i sense col·liri a la mà per a alleujar la sequedat ocular, els cau, a totes, un regalim de cafè amb llet pels llavis mig oberts de tanta notícia com reben… I del…, sí de Manolo, disen que va por ahí un poco trencaet de color, pero sin inmutarse demasiado, llevando, eso sí, a todo el mundo que le quierte cobrar, al retrotero. Yo no sé cómo hay tanta caradura suelta por la calle, y siembla que tienen conosimiento, pero no lo tienen, ni pisca de conosimiento que tienen. Mi suegra dise: qui no té diners no té vicis, recollons! Y tiene razón la pobre, tanta razón como tiene mi suegra. Yo, si mi marido me dise que quiere haser l’alferis, le rompo tres o cuatro costillas con el mango de la escoba, y luego llamo a l’ambulansia para que se lo lleven al manicomio: si no tenemos pan compraremos abanicos. Es que hay cada uno…, no pos ellas…, son peores todavía que sus maridos. Y se hasen la ricas, y todas la semanas a la peluquería, a gastar…y deben ni se sabe…las peluqueras han dicho que se van a haser un seguro colectivo por si las moscas.
I remata Carmencín: yo no es por nada, y no me gusta hablar de nadie, pero… antes de haser una cosa asin, haser d’alferis por ejemplo, tendrían, los hombres, que haser una declarasión de bienes, pa ver si pueden o no, y asin se evitarían muchos acontesimientos raros y desagradables, verdat? Aunque bien mirado a nosotras qué nos importa? Verdat? Mi suegra dise: cascú s’apanye! Y tiene razón la pobre…verdat?
j. sou