El miércoles 19 de noviembre se celebraró un acto público en el Círculo Industrial para conmemorar el cincuenta aniversario de la publicación del libro ‘Concierto en Mi Menor’ de Juan Gil-Albert. El acto, en el que se presentó una reedición del mismo, contó con la participación de Claudia Simón, sobrina del escritor, y con las intervenciones de Manuel Palomar, rector de la Universidad de Alicante, Vicente Boronat, presidente de Mutua de Levante y Antonio Francés, Alcalde de Alcoy, representantes de tres de las instituciones que han colaborado en el evento y en la reedición del libro de este insigne autor alcoyano.
Juan Gil-Albert, nombre por el que era conocido Juan de Mata Gil Simón, fue un poeta y escritor nacido en Alcoy en 1904 en el seno de una familia de la alta burguesía que se trasladó a vivir Valencia a los nueve años. En 1927 publicó sus primeras obras La fascinación de lo irreal, y Vibración del estío, acogidas con entusiasmo por la crítica. Poco después entró en contacto con el grupo de poetas, que posteriormente serian conocidos como la generación del 27, de la que el propio Gil-Albert formaría parte, como Federico García-Lorca, Juan Ramón Jiménez, Luis Cernuda, Manuel Altolaguirre, Vicente Aleixandre, Rosa Chacel o Miguel Hernández.
En 1937 cuando Valencia se convirtió en capital de la agónica II República la casa de Gil-Albert se convirtió, a su vez, en centro de reunión de los intelectuales republicanos. Con el triunfo del ejército franquista Juan Gil-Albert hubo de dirigirse al exilio, como otros tantos de miles de españoles. Primero a México, donde trabajó en la revista Taller con Octavio Paz y, posteriormente, a Argentina donde conoció a Jorge Luis Borges.
En 1947 regresó a Valencia donde al margen de las corrientes dominantes y sin ningún tipo de contacto con los medios sociales y culturales franquistas se dedicó a una intensa actividad creativa, que no tendría reconocimiento público hasta 1974 con la publicación de Fuentes de la constancia, una antología poética que lo rescató para la crítica y Crónica general, que, de alguna manera, le popularizó entre el gran público. La consagración definitiva le llegó en 1982 con la concesión del Premio de las Letras del País Valenciano. Años después recibiría la medalla al Mérito de Bellas Artes, fue nombrado doctor Honoris Causa por la Universidad de Alicante e hijo Predilecto de Alcoy. Su obra completa en prosa fue editada en 1985.
Juan Gil-Albert falleció en Valencia a los ochenta y nueve años.