El Ayuntamiento de Alcoy ha aprobado una Ordenanza Municipal de Decoro y Buenas Prácticas Indumentarias, que prevé fuertes sanciones económicas para los hombres gordos que vayan por las calles del casco urbano sin camiseta y enseñando la barriga cervecera. Esta normativa, que ha generado una fuerte oposición, también incluye multas para aquellas personas que vayan a tirar la basura en pijama y batín.
Desde el gobierno municipal se justifica esta decisión afirmando que “se trata de evitar a los alcoyanos y a los turistas la contemplación de la penosa imagen de un hombre obeso mostrando todas sus mollas y redondeces flácidas y sudorosas. Hay cosas que es mejor no ver”. Se ha adelantado la aprobación de la ordenanza tras la llegada de la oleada de calor, que ha hecho que las calles de la ciudad se llenen de tipos orondos con todo al aire.
Se fijan multas de hasta 700 euros. Están especialmente penalizados los gordos que se suben la camiseta y que se la colocan a modo de top dejando al aire la barriga peluda. En este caso, las sanciones económicas se ven acompañadas por penas de cárcel. Queda exentos de todos estos castigos los hombres musculosos con tableta de chocolate, para los que incluso se incluye una línea de subvenciones municipales para que se hagan tatuajes. Según fuentes municipales, “se trata e incentivar el buen estado físico de todos los alcoyanos”.
La normativa municipal ha generado una gran polémica ciudadana. Colectivos como la Asociación de Amigos de la Potrota y la Peña Voll Damm han calificado el decreto de claramente discriminador y han anunciado que iniciarán de inmediato acciones judiciales. Por su parte, Guanyar Alcoi afirma que es necesario abrir una reflexión sobre la gordura alcoyana y ha planteado la posibilidad de sustituir las multas por penas de gimnasio y por paseos guiados por la vía verde.
La Ordenanza del Decoro incluye otras medidas igualmente espectaculares e innovadoras. Para los meses invernales, ha creado una línea de sanciones para todas aquellas personas que bajan la basura en pijama y cubriéndose con un batín viejo. También se establecen fuertes multas para las mujeres que combinen el chándal con los tacones y para los jóvenes que exageren con su costumbre de llevar pantalones cagados.