La rotura de un tirante del puente Fernando Reig que obligó a cerrar la infraestructura al tráfico y a los peatones, ha sido calificada finalmente como desgarro por los técnicos del Ministerio, ‘seguramente -ha declarado el cuñado de uno de los responsables – se ha producido por la super elongación de la cinta aislante que mantenía unido el tirante, por una contracción del hilo de palomar que lo mantenia unido a la base o bien porque la cuña de madera sapelli (medio sapelli medio railite) que estabilizaba el mojón ha cedido al realizar un esfuerzo superior a su capacidad de resistencia a la tensión.’
El Ayuntamiento para evitar posibles daños a las personas en caso de un hipotético derrumbamiento de la infraestructura ha desviado, provisionalmente, el tráfico que circulaba por encima del puente por debajo del mismo, mientras baraja varias opciones para facilitar el paso de peatones de una a la otra orilla: desde la instalación de una pasarela de troncos y cuerdas rollo ‘Indiana Jones y el Templo Maldito’, hasta un teleférico que uniría la zona Santa Rosa con Cantagallet o un servicio de lianas.
Mientras el Consistorio y los técnicos de Fomento buscan la solución definitiva que garantice la estabilidad de la infraestructura, la Policía Comarcal – según ha podido saber este periódico- ha abierto una investigación por si pudiera existir relación entre los ruidos y movimientos detectados por los operarios el día de autos y el hecho de que dos vecinos (vecino y vecina) del edificio anejo al puente estuvieran practicando sexo, en ese preciso instante, dado que – como ha declarado la vecina del piso de abajo de ese mismo inmueble – ‘Eixos dos tenen un follar molt sentidet.’