El Ayuntamiento de Alcoy ha roto todos los esquemas con una decisión imaginativa para reactivar la hostelería en plena pandemia. La concejalía de Turismo ha firmado un convenio con la Comunidad Autónoma de Madrid para quedarse con los stocks de franceses sobrantes de la capital. Los turistas galos empezarán a llegar (en calidad de cedidos) a partir del próximo domingo y para atenderlos se ha aprobado un horario especial, que ampliará el cierre de los bares y de los museos.
La idea surgió después de que diferentes técnicos municipales vieran los telediarios y comprobaran que en las calles de Madrid ya no había suficiente espacio para los turistas procedentes de Francia. Responsables de la corporación se dirigieron a la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso planteándole la posibilidad de un convenio de colaboración. La dirigente autonómica aceptó de inmediato, señalando que “en estos momentos no nos cabe ni un turista más en las zonas de copas”. La famosa política del PP firmó el pasado martes el acuerdo, que incluye como única condición la obligación de devolver a Madrid los turistas prestados en cuanto pase la pandemia.
Desde la concejalía de Turismo se ha puesto en marcha un plan para hacer más agradable la estancia de los visitantes del país vecino. Se ha contratado al famoso chef François, conocido por su anuncio de quesos, para “prepagag cenas de picoteo” en diferentes restaurantes de la ciudad. Asimismo, las tres bandas de música de Alcoy recorrerán las calles del centro durante todo el día, interpretando piezas clásicas del repertorio francés, como: la Marsellesa, la Vie en Rose o Ne me quitte pas. Por su parte, el Centro Municipal de Cultura ha programado un ciclo de películas de Louis de Funes en versión original, para que los turistas se sientan como en casa. Aunque en un primer momento se planteó la posibilidad de cambiar provisionalmente el nombre de Alameda Camilo Sesto por el de Boulevard de Gilbert Becaud, finalmente esta propuesta ha sido descartada al ser demasiado radical.