La Historia de Alcoy está llena de personajes brillantes, a los que hemos dedicado calles, monumentos y hasta pasodobles dianeros. Sin embargo, también existe una larga lista de gente anónima, cuyas acciones han jugado un papel básico en la construcción de una identidad alcoyana. Desde Tipografía La Moderna queremos rendir un homenaje a estos ilustres desconocidos y rescatar del olvido sus hazañas, sus desdichas y sus momentos de gloria.
1.Servando Madrona, el guardaespaldas de Pelletes
Es uno de los personajes más desconocidos de la historia alcoyana. Servando Madrona, nacido en la localidad albaceteña de Hellín, era un sargento de la Policía Municipal de Alcoy, que se encargaba de la seguridad personal del alcalde Agustín Albors, Pelletes. Cuando el primer edil fue asesinado durante los sucesos del Petrolio, Madrona estaba pasando en El Campello unos días libres correspondientes a sus vacaciones de verano. El desafortunado agente de la ley alegó antes de su marcha que “creo que me puedo ir, por que veo la situación muy tranquila”. Tras la muerte de Pelletes en 1873, fue cesado inmediatamente por falta grave. Posteriormente, se comprobó que Servando Madrona había falsificado su curriculum profesional, ocultando que ocho años antes había formado parte del servicio de protección del presidente de Estados Unidos Abraham Lincoln, asesinado en 1865 mientras asistía a una función teatral. Lo que se dice un gafe.
2.Antulio Olcina Pastor y la singularidad de la Cabalgata
La Cabalgata de Alcoy aparte de ser la más antigua de España tiene la particularidad de que, a diferencia del resto, el rey negro, aquí denominado Gaspar, se sitúa en medio de los otros dos monarcas. ¿A qué se debe esto? ¿Es fruto del azar? ¿Un designio divino? Más bien, no. El causante de esta singular seña de identidad no fue otro que Antulio Olcina, selfatinero y maquillador vocacional, muy dado a la bebida, que un 5 de enero de 1917 a causa de un mal guitarró se confundió y pintó de negro al rey del medio en lugar del que desfilaba al final, que era el que tocaba. Como el tiempo apremiaba el hecho fue silenciado y asumido con normalidad por la organización y con el tiempo se convirtió en una de las más arraigadas tradiciones alcoyanas. Lo cierto es que tras el incidente, Antulio no volvió a maquillar en Alcoy. Aunque sí lo hizo en poblaciones vecinas donde en alguna ocasión llegaron a desfilar hasta tres reyes magos negros.
3.Hermanas Berenguer, autoras materiales de la muerte de Al Azraq
Saurina y Gimena Berenguer eran dos hermanas charcuteras, que jugaron un papel fundamental en la defensa de Alcoy frente al ataque de Al Azraq. Las últimas investigaciones históricas señalan que estas dos mujeres, conocidas en todo el Reino de Valencia por si fiereza, fueron las autoras materiales de la muerte del caudillo musulmán, al que propinaron una paliza mortal golpeándolo repetidamente en la cabeza con dos piezas de potrota de gran tamaño, procedentes de la carnicería que regentaban en una zona cercana a lo que hoy es la calle de la Purísima. Aunque fueron aclamadas por todos los alcoyanos, su hazaña fue posteriormente silenciada por los cronistas oficiales del Rey Jaime I, que atribuyeron los hechos a los cuarenta caballeros de Játiva. Se consideraba que esta intervención femenina en un acontecimiento bélico de tal envergadura menoscababa la virilidad y el honor de los soldados que defendieron la plaza. Esta manipulación de la Historia ha tenido consecuencias a través de los siglos, ya que ha impedido a las alcoyanas participar en sus Fiestas de Moros y Cristianos, alegándose que “en 1276 las mujeres no iban a la guerra”.
4.Séfora Torregrosa, embajadora de la ‘Real Casa de Paños’
Uno de los principales enigmas de la historia de Alcoy es descubrir por qué el rey Felipe V, concedió privilegios a la Real Fábrica de Paños de Alcoy, cuando tan sólo unos años antes, durante la Guerra de Sucesión, la ciudad se alineó junto al Archiduque Carlos de Austria, su más acérrimo enemigo. La respuesta podría hallarse en Séfora Torregrosa, una trabajadora de la Real Fábrica de Paños que a causa de la guerra hubo de cambiar su oficio de tejedora por el más antiguo del mundo. Y que tras la victoria felipista marchó a Madrid siguiendo al bando vencedor. Al llegar a la capital, tras un encuentro fortuito en el Retiro con el monarca, la alcoyana acabó convertida en ama del rey Borbón; quien por lo visto tras su apariencia de rectitud y religiosidad escondía un alma masoquista, que disfrutaba hasta el delirio cuando Séfora lo colgaba cabeza abajo y mientras con una mano le azotaba las nalgas con la otra le introducía por el ojo del culo un canuto de pergamino con su Decreto de Nueva Planta. Parece ser que en agradecimiento a tales servicios Felipe no sólo concedió privilegios a la empresa dónde había trabajado Séfora en su juventud, sino que además le puso un bonito apartamento en la zona de Moncloa (sentando un precedente que ha llegado hasta nuestros días.)
5.Jean Marie Snuffel, introductor del flato en la ciudad
Hasta la llegada a Alcoy de Jean Marie Snuffel, barón de Saint Duyet, los alcoyanos eran personas relativamente normales. En el siglo XVIII, este noble francés implantó el flato en la ciudad, convirtiendo la fea costumbre de estirar el brazo más que la manga en uno de nuestros vicios nacionales. Snuffel se instaló durante tres años en un palacio ubicado en la calle Mayor y se hizo famoso por organizar brillantes fiestas sociales, en las que se distribuían carísimos manjares y actuaban quintetos de cuerda y sopranos operísticas de fama internacional. Los alcoyanos de postín imitaron rápidamente el ejemplo del barón, montando saraos lujosos y copiando su estilo de vestir, en el que destacaba un sombrero con plumas muy popular en la Francia de la época, conocido con el nombre de “le flatteau”, que daría origen a la palabra flato. Con el paso del tiempo, se descubrió que Snuffel era en realidad un timador muy hábil, que se marchó de Alcoy dejando un gigantesco rastro de facturas sin pagar y de gente cabreada. Su herencia flatosa se quedo con nosotros para siempre.
6.Otto von Rittín, inventor del “cardat alcoià”
Este Doctor en Termodinámica por la Universidad de Leipzig y en Ingeniería Aeroespacial por la de Berlín no será recordado por haber sido alumno aventajado de Werner von Braun, ni por haber colaborado en el lanzamiento del primer cohete moderno. Otto von Rittín pasará a la historia como el inventor del “cardat alcoià”. El hecho que tuvo lugar en Dènia, ciudad donde residía desde su huida de Alemania en 1945, tras haber colaborado con la Wehrmacht nazi. Dicen que harto de oír a su mujer (de origen alcoyano) quejarse de su peinado: ‘Mira quin monyo duc Otto, semble una loca’, se encerró en el sótano de su casa hasta obtener un producto elaborado a base de combustibles fósiles utilizados en cohetes, que al aplicarlo al cabello de su cónyuge no solo lo mantuvo firme sino que además adoptó la característica forma redondeada de casco de astronauta, en homenaje a su pasado de Ingeniero Aeroespacial. En 1971 Otto von Rittín creó una nueva fórmula con queroseno, que daba volumen y cuerpo a los cabellos secos y quebradizos. Dicen que Camilo Sesto compró todas las existencias del producto y la propia fórmula, que hoy se guarda bajo llave en Atlanta junto a la de ese otro famoso bebedizo llamado Coca-Cola.
7.Joaquín Sellet, desafortunado descubridor de la aceituna rellena
Reputado borrachín alcoyano de finales del Siglo XIX, Joaquín Sellet (alias Ximo El Mona) pasaba la mayor parte de su tiempo en las tabernas del barrio de la Verge María. Hombre sin oficio ni beneficio, empalmaba las borracheras durante los siete días de la semana, por temor a volver a su casa, ya que su mujer era conocida en toda la comarca por su excepcional fealdad y por su carácter avinagrado. Durante una de sus largas estancias etílicas en una bodega de la calle San Miguel, Sellet trasegaba vino peleón con una tapa de olivas y otra de anchoas. Por matar el aburrimiento, vació una aceituna gordal con su navaja y colocó en su interior un trocito de anchoa. Al probar su invento, quedó entusiasmado con su sabor y corrió a su casa para anunciar el descubrimiento. Sus expectativas se vieron defraudadas por su esposa, que le espetó “¡eso de las olivas rellenas es una gilipollez, que no va a ningún sitio. A ver si dejas de perder el tiempo en tonterías y te buscas un trabajo como Dios manda, borracho de mierda!”. Por culpa de aquella bruja, el pujante sector aceitunero alcoyano tuvo que esperar varias décadas para desarrollarse.
8.Oriol Pedragosa o en boca cerrada no entran moscas
Muchos conocen la desdichada historia de Joan Prats un viajante de comercio afincado en Alcoy que en el siglo XVI fue perseguido y ajusticiado por haber robado cuarenta hostias de la iglesia parroquial (Véase leyenda del Jesuset del Miracle). Debido a las numerosas irregularidades del proceso los investigadores actuales creen que tras este presunto sacrilegio se escondían intereses inmobiliarios eclesiásticos (su casa fue convertida en convento) xenofobia vecinal y una inconmensurable malapata. Pues cuando el 14 de enero de 1565 Joan Prats se disponía a marchar a Francia desde su Barcelona natal para abrir nuevos mercados fue convencido por su cuñado Oriol Pedragosa, en el transcurso de una comida familiar, de que lo hiciera hacia Alcoy, una ciudad emergente, con grandes oportunidades para los emprendedores, habitada por gente de mente abierta, amistosa y muy hospitalaria.
9.Gaetano Asvaronni, el arquitecto pizzero
Corrían los alegres años noventa del pasado siglo y los gobernantes socialistas de la Generalitat Valenciana vivían poseídos por dos obsesiones: el mármol y los arquitectos italianos. En plena fiebre transalpina, Alcoy fichó al arquitecto florentino Gaetano Asvaronni para que rediseñara las calles del centro. Este reputado artista venía a nuestra ciudad precedido por el éxito internacional obtenido en el diseño de la famoso Retrete Bernini, que fue instalado en todos los aseos públicos de la ciudad de Turín. Asvaronni jugó fuerte instalando mármoles resbaladizos en San Nicolás, la plaza de España y San Lorenzo. Las innumerables caídas de peatones alcoyanos durante los días de lluvia, con su consiguiente corolario de fracturas de piernas y de brazos, acabaron con su prometedora carrera como urbanista. Actualmente, regenta la pizzería familiar “Corleone”, ubicada en pleno centro de Florencia. Su receta de tiramisú ha recibido importantes premios en diferentes concursos regionales.
10.Remigio Aznar pionero del alcoià
Remigio Aznar, también conocido como Migi Zamenhof, además de pescadero en la calle Entença fue el inventor del idioma alcoyano. Sin apenas conocimientos de lingüística pero con un gran amor por lo ‘suyo’ postuló la teoría de que lo que se habla en Alcoy no es valenciano ni catalán mal pronunciado sino que se trata de una lengua única y singular: el alcoyano. Un idioma que lo mismo podría provenir del ibero, del árabe, que del hugro-fines. Esta teoría que ha pasado totalmente desapercibida entre los estudiosos de la lengua ha despertado, sin embargo, un gran interés en les filaes por resultar emotiva, emblemática y entrañable. En la actualidad Aznar trabaja en un estudio definitivo sobre la dialectología de este idioma que incluye dialectos como el liangshangponés (hablado en la Zona Norte), en el eixamplí (hablado en la calle Entença), el oliveriano bajo (en las calles de Alzamora hasta Oliver número 23), el oliveriano alto (desde Oliver, 23 hasta El Collao) y el batoyero (Barrio de Batoy).
11.Vladimiro Lenin Jordá, responsable del derribo Santa María
Comunista convencido y arquitecto titulado con una beca por la Universidad Popular Soviética de Stalingrado. Vladimiro Lenin Jordá fue el principal responsable del derribo de la Iglesia Arciprestal de Santa María durante la Guera Civil del 36. Este destacado intelectual del PCE local también decidió utilizar las piedras para construir la piscina municipal. Su significación política durante la contienda le obligó a exiliarse a México tras la victoria de los nacionales. Dado su brillante curriculum, el gobierno mexicano del presidente Pancho Cárdenas le nombro director general de Patrimonio del Estado de Zacatatecas. Fue cesado fulminantemente tras presentar un proyecto que planteaba la demolición de dos grandes pirámides mayas, para utilizar las piedras de estos dos monumentos en la construcción de un centro comercial de la cadena Simago Prisunic en Tijuana. Tras recibir la jubilación anticipada, dedicó su vida a investigar la relación entre la música festera y los mariachis. Recopiló estos trabajos en un libro titulado “Berberisco no te rajes”.
12.Telesforo Ortiz Ortiz o la fuerza de un visionario
Telesforo Ortiz fue un ingeniero militar nacido en Alicante que recaló en Alcoy, donde realizó la mayor parte de sus proyectos (proyectos ya que ninguno de ellos vio la luz). Con tan sólo 30 años planeó la construcción de una torre de homenaje de 30 m. de altura y un foso de 15 m. de profundidad en el castillo de Fiestas, propuesta que, como tantas otras, fue desestimada por la Asociación de San Jorge. Más tarde se integró en el equipo de ingenieros que diseñaban el trazado del tren Alcoy-Alicante cuyas obras se suspendieron con el estallido de la Guerra Civil. Finalizada la contienda, Ortiz siguió elaborando proyectos sin que ninguno se hiciera realidad (Ferrocarril a Turballos, canal fluvial Alcoy-Gandía, teleférico Teular del Llonganisser – Pico del Águila). Al final de su vida consiguió amasar una pequeña fortuna diseñando casetas para perros y urinarios portátiles. A su muerte sus herederos encontraron un baúl con proyectos que él mismo había desechado tales como: un hotel en la Font Roja, una urbanización en Serelles, un edificio con piscina debajo del Puente de San Jorge, un campo de golf en Xirillent o la urbanización de la plaza Al-Azraq.
13.Biosildun Terol, autor de los plomos ibéricos de la Serreta
Biosildun Terol trabajaba de auxiliar administrativo en el poblado ibérico del Puig y hacía unas cuantas horitas a la semana para llevarles las cuentas a las sacerdotisas del santuario de la Serreta. Científicos alemanes de la Universidad de Maguncia han publicado un trabajo en el que no dudan en atribuirle la autoría de los plomos ibéricos. En este estudio se descarta totalmente que estos textos correspondan a una oración a la Diosa Madre, señalándose que las famosas tablillas son en realidad un arcaico informe de impacto ambiental en el que se señalan los graves riesgos de un plan para construir una factoría de producción de exvotos ibéricos de arcilla y bronce en la zona de la Canal. En esta misma investigación arqueológica se plantea también la posibilidad de que el citado Biosildun Terol fuera en realidad el primer miembro conocido de la Colla Ecologista La Carrasca, aunque esta hipótesis no ha podido ser confirmada.
Ay!Ay!Ay!Ay!… Por poco va y me lo creo todo…Ay!Ay!Ay!Ay!… Tenéis unas cosas que andando, andando, se os mueven. Me he reído mucho. Todo me ha siemblado muy gracioso.