Final de vacaciones y otoño caliente. Dicen los que de esto saben que nos esperan meses de susto y pavor. El patio periodístico viene removido y las redes sociales (como mandan los cánones) se incendian un día sí y al otro también. A mí, sólo se me ocurren preguntas sin respuesta. Ahí van unas cuantas.
¿Qué haces cuando crees que el independentismo catalán es una locura colectiva inspirada por un grupo de vividores de la política?, ¿qué haces si también crees que los principales paladines de la unidad de España son una cuadrilla espantosa de tipos pasados de rosca que cada día se parecen más a un comando de ultraderecha?, ¿cómo asimilas que un gobierno de izquierdas, nacido de la necesidad de humanizar la gestión pública, se olvide de derogar una esclavista reforma laboral del PP que lleva años jodiéndoles la vida a miles de personas, mientras declara tema prioritario la retirada de la momia de Franco del Valle de los Caídos?, ¿cómo le explicas a alguien tu desacuerdo con el asesinato cinematográfico de Woody Allen sin que ese alguien te considere un machista asqueroso?, ¿conviene callarse si eres partidario del cierre definitivo del tren Alcoy-Xàtiva, ya que piensas que para lo que sirve actualmente la línea (y para las perspectivas de futuro que tiene), lo mejor es darle matarile?, ¿qué clase de argumentos le planteas a un juez que vive en la Edad Media para convencerle de que no se puede meter a nadie en la cárcel por hacer una canción o por difundir un chiste?, ¿con qué cara le contestas un tipo exaltado que dice que todos los medios de comunicación del país (absolutamente todos) son siervos del capitalismo y mienten por sistema para impulsar una inmensa operación de lavado de cerebro colectivo?, ¿con qué cara le explicas a ese mismo tipo exaltado que las noticias incendiarias ofrecidas por un bloguero de Pontevedra con barba de chivo y gorra de la Guardia Roja carecen de la más mínima credibilidad?, ¿cómo le explicas a un turista finlandés que en este país andan por la calle los violadores de la Manada, mientras se mantiene en prisión a un grupo de políticos catalanes, que lo único que han hecho es votar a favor de la independencia?, ¿qué debe hacer un tipo de izquierdas si considera que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, es un sátrapa impresentable, que está sumiendo a su país en la miseria y enviando a miles de paisanos a un exilio incierto?, ¿a quién le cuentas que la entrada de la mujer en la fiesta de Alcoy no estará completa hasta que haya una capitana, una sanjordieta y una escuadra especial formada toda por chicas?, ¿con qué clase de cachiporra habría que darle en la cabeza a un pirado que lleva años colgando en internet que el zumo de limón cura el cáncer sin que ninguna institución sanitaria se haya dignado a frenar sus desvaríos?, ¿es necesario apuntarse a algún curso de rehabilitación si uno no tiene perro y se pone de los nervios cada vez que lee en un periódico noticias sobre “el fallecimiento” de algún can?, ¿es pecado cabrearse con esos ciclistas que te hacen el abanico en una carretera comarcal y que te obligan a circular a 10 kilómetros por hora?, ¿habría que instaurar algún tipo de sanción económica para aquellas personas que usan más de veinte veces en un artículo periodístico las palabras nazi y fascista?, ¿sería necesario expulsar del PSOE a todos aquellos militantes a los que les entra la risa floja cada vez que ven fotos de Pedro Sánchez haciendo posturitas kennedyanas o practicando el running en la Moncloa?, ¿algún puñetero político de este puñetero país llamado Comunidad Valenciana logrará algún día resolver de forma definitiva el tema de la lengua autóctona o estaremos así hasta el año 3.000?, ¿qué extraña enzima tienen en el estómago los dirigentes del PP, que hace posible que se declaren los principales defensores de España, mientras ponen cara de paisaje ante casos de corrupción que han supuesto el saqueo de miles de millones del patrimonio de los españoles?, ¿es verdad que los ciudadanos de izquierdas que no votan a Podemos se irán directamente al infierno sin pasar ni siquiera por el purgatorio?, ¿no les resulta sospechoso que en una de las peores crisis económicas de la historia y con un mercado laboral que cada día se acerca más al de Bangladesh se haya desatado la mayor campaña mediática de la historia en contra de los sindicatos? y para acabar ¿qué cojones ha pasado con Alcoinnova, por qué nadie (ni sus defensores ni sus enemigos) habla ya del polémico proyecto industrial de La Española en Alcoy?.
El divendres 14 de setembre hi ha una festa a la Glorieta por celebrar la paralització, de moment, del projecte Alcoinnova en el Tribunal Superior de Justícia de CV, a l’espera del recurs de casació presentat per l’empresa al Tribunal Suprem.
Per cert, el que dius dels polítics vividors t’ho podries haver estalviat, perquè els que estan a la presò, sobre tot, i el que són a l’estranger estan pasnt-ho de «puta mare»
Salut
Que en el que tu anomenes Comunidad Valenciana, eixe invent d’Alfonso Guerra que està aconseguint els seus propòsits (dissoldre els valencians en la pura indiferència), que al País Valencià, vaja, ni a Espanya ni potser ara com ara a Europa no s’haja produït un moviment polític transversal i impulsat des de la base com el que és majoritari a la societat catalana en la lluita per la República, no vol dir que siga impossible. El model d’ignorants masses que segueixen com corderets el que hàbils i manipuladors polítics els diuen no funciona avui a Catalunya. Si així fos, ja l’haurien esborrat del mapa. L’argument que esgrimeix Ximo contra el fàcil i tòpic ‘polítics vividors’ aplicat als dirigents independentistes que són a la presó o a l’exili, investigats o embargats, em sembla definitiu. El pessimisme d’arrel espanyola veu impossible una altra cosa que no siga la trista mediocritat celtibèrica. Ni ho veu ni ho comprén ni fa cap intent d’entendre-ho. Es conforma de negar l’evidència. «Cree el ladrón que todos son de su condición» diuen en castellà, però han oblidat l’avís i utilitat de tan savi consell.