De entrada esta frase típicamente alcoyana puede inducir a confusión, porque como todo el mundo sabe los huevos son objetos inertes (a expensas de lo que tengan que decir los portavoces de los partidos de extremo centro) y los objetos inertes entre otras muchas cosas carecen de glándulas sudoríparas y por tanto de la posibilidad de sudar. Al menos de entrada, porque la realidad es bien diferente y resulta que sí hay huevos que sudan.
Por ejemplo, todos aquellos situados en la zona inguinal. Los que dan lugar a la expresión ‘me suda, o me la suda, un huevo’. Manifestación vulgar que significa que algo no preocupa en absoluto o no interesa. De hecho todo lo situado en la zona inguinal (polla, coño, ovarios, etc.) tiende a padecer de hiperdrosis o sudor excesivo, y a formar frases con idéntico significado.
También sudan los huevos de ave cuando sufren cambios bruscos de temperatura (por ejemplo de los 4 grados del interior de una nevera a los 21 del exterior). Entonces se forman unas pequeñas gotas de agua sobre la cáscara debido en parte a la condensación y en parte al alivio que le produce encontrarse en un espacio abierto y a una temperatura razonable.
En cualquier caso se puede concluir que la expresión ‘estar com un ou que sua’ recoge la suma de las sensaciones que experimentan ambos huevos (los inguinales y los de ave) y en Alcoy viene a designar la sensación un estado placentero, agradable, feliz, despreocupado. Vamos como una especie de Nirvana donde no existe deseo ni sufrimiento. Ejemplo: ‘L’han jubilat a i s’ha quedat com un ou que sua’. ‘Hildegarda Matarredona en morir el seu home es va quedar com un ou que sua’.
NOTA CULTURAL DE INTERÉS.- Hay otros huevos que si bien no sudan se encuentran todo el día a remojo como l’ou com balla que es una tradición nacida en la catedral de Barcelona en 1637 y que consiste en hacer bailar un huevo en los surtidores de las fuentes el día de Corpus Christi.