La pandemia ha modificado de forma radical nuestro ocio. Los grandes viajes se han visto sustituidos por un turismo de cercanía, que tiene en los parajes naturales y en los entornos históricos sus principales puntos de destino. Dentro de este fenómeno hay que incluir la masiva afluencia de visitantes al poblado íbero del Puig de Alcoy durante los fines de semana. Es un entorno singular, que ofrece una buena forma de pasar un rato del fin de semana en estos duros tiempos de alarma.

Los vecinos de la urbanización del Estepar han notado este sutil cambio en los últimos dos o tres meses. Cada fin de semana aumenta el número de personas que se acerca al poblado íbero del Puig. Grupos familiares y cuadrillas de excursionistas procedentes de diferentes puntos de la provincia llenan la agenda de un día festivo con una visita a este yacimiento arqueológico, situado en una ubicación geográfica privilegiada. Es un recorrido corto e instructivo por los restos reconstruidos de un núcleo ibérico fortificado, que remonta sus orígenes al siglo VII antes de Cristo y en el que llegaron a vivir 300 personas. Casi sin ruido y sin apenas promoción, este pedazo de la Historia de Alcoy se ha añadido a nuestra larga lista de ganchos turísticos. Caminar por las calles que construyeron nuestros antepasados y contemplar las impresionantes vistas desde la altura son propuestas muy interesantes para unos tiempos en los que han cambiado los modelos turísticos.

El nuevo ocio viene impulsado por la crisis sanitaria y por la posterior recesión económica. Tiene como característica principal la búsqueda de los espacios abiertos y del aire libre, como escenarios menos arriesgados para el contagio del fatídico covid 19. Estamos ante una deriva turística inesperada, que está llenando nuestros parajes naturales con un regreso al excursionismo de caminata y bocadillo. No hacen falta grandes campañas promocionales, los buenos sitios se difunden gracias al boca oreja o a las redes sociales. En Alcoy, han sido espectaculares las afluencias registradas por la zona del Molinar durante los fines de semana. Ahora, el Puig se convierte en un nuevo capítulo de esta guía